Laia y Nacho querían celebrar una pequeña fiesta en la playa, en plan chill out, y contrataron nuestros servicios para que nos ocupáramos de todo.
Una pequeña cala escondida de la costa de Tarragona fue el lugar elegido por los novios. Para llegar a ella los invitados tenían que bajar por unas escaleras que decoramos con velas de té colocadas dentro de tarritos de cristal. A sus pies cuatro antorchas y un centenar de velas de té iluminaban el camino que los dirigía hacia la zona chill out.
Allí les esperaba un pica-pica muy peculiar, y es que todos los platos elegidos tenían un significado para los novios, desde los nuggets del MacDonnalds hasta las croquetas, pasando por los berberechos. Y para que a nadie le pasara desapercibido este detalle preparamos unos cartelitos, diseñados por Project Party Studio, con nombres tan divertidos como: “Croquetas casi tan buenas como las de mami”, “Berberechos de las excursiones domingueras” o “Pan de Pita del tío David”, entre otros. Y de postre… Donetes de chocolate con leche y chocolate blanco y deliciosas galletas de la suerte.
Unos divertidos camioncitos de arena llenos de cubitos y palas esperaban impacientes a los invitados más pequeños, que disfrutaron de lo lindo jugando con ellos.
Pareos en el suelo a modo de mantel, cojines sobre la arena para sentarse a comer, antorchas y velitas para iluminar, música relajante para crear ambiente y buena compañía, ¿se puede pedir algo más? ¿Qué tal una barra libre de mojitos? Pero una barra libre muy peculiar, pues eran los propios invitados quienes debían preparar sus mojitos.
Y como fin de fiesta, los novios y sus invitados pidieron buenos deseos iluminando el cielo con una veintena de sky lanterns.
Y por supuesto en una fiesta como esta no puede faltar un buen fotógrafo que recoja con su cámara las mejores imágenes de la fiesta. En este caso Stuart Naph es el artífice de estas preciosas fotografías. ¡Muchísimas gracias Jose Luís por hacer estas fotos tan bonitas de la fiesta!
Fuente:bodasdeluxe
